La miniserie The Hood me encantó. Me fastidió muchísimo que no tuviera el éxito necesario para garantizar una continuación. Brian K.Vaughan escribió un gran relato del origen de un supervillano, pero uno de verdad, con sus dudas y sus miserias. Al dibujo estaba Kyle Hotz, un seguidor de la escuela de Bernie Wrightson que nunca me había llamado mucho la atención. Hasta ese día, en que aprecié al narrador, al creador de climas.
Hotz sólo quería vender las portadas de la miniserie en bloque, las seis de golpe. Y francamente, tantas no necesito...
Pero llegó navidad y los gastos, las compras... ¿Os acordáis que ya comenté el tema por entonces? Pues eso. Que las subastó su agente por separado. A mí me interesaba sobre todo la portada del cuarto número ya que es en donde se ve mejor al protagonista. La más vistosa, en mi opinión. Y que como quien más quien menos tenía otras prioridades lo conseguí muy bien de precio. Vergonzoso, de hecho.
¿Que por qué lo cuelgo ahora? Aunque me llegó el viernes (y ahora he podido escanearlo con un mínimo de calidad), estuve pendiente de que Hotz me lo dedicase pero no ha habido forma de que su agente y él coincidieran ya que Hotz ha tenido un nuevo hijo y su plan de trabajo anda un poco caótico. Así que me cansé y le dije que me lo mandara ya.
Para compensarme la espera, me ha regalado el sketchbook de Hotz, firmado y numerado. Muy bonito, la verdad. Un montón de ilustraciones de terror hechas por puro placer del autor y donde de ven las pasiones del autor por Lovecraft, la Hammer y Clive Barker.
Lo divertido es ver que este amante del terror y de lo macabro pone junto a su firma un corazón y las iniciales de su mujer(EKH, por Eilen-o algo así, no me hagáis revisar mails atrasados-Kyle Hotz ya que las griegas toman el nombre del marido como segundo nombre suyo)...
Con el agente con tanto mail arriba y abajo, ahora tengo muy buen rollo. Sobre todo desde que hablando de cosas personales ha resultado que su mujer también en farmacéutica y que su padre colecciona parafernalia farmacéutica, por lo que le estoy recogiendo bolígrafos con publicidad de medicamentos o laboratorios... Nunca está de más quedar bien con otros aficionados.