El motivo de que me acuerde de ello con bastante detalle es que en el cine tuvieron la brillante idea de meter el trailer de una película de terror ante la audiencia infantil. Me dejó acojonado una escena en que un hombre se acercaba a una caja abierta y una mano vendada salía y lo estrangulaba.
Durante años he estado buscando información sobre esa película. El aspecto formal que recordaba me hacía sospechar que era una película británica, no americana, y mi memoria me decía que el film se llamaba Mansión macabra.
Evidentemente, mi memoria me traicionó ligeramente, como ya habréis sospechado por la imagen que encabeza este texto. La película en cuestión era Refugio macabro. Claro que igual no, porque parece que se editó en VHS hace años como La casa de los locos... Descubrí que estaba esta película en DVD, en una edición cutrísima, por cierto, y algo me dijo que tal vez era ése el film cuyo trailer tanto me impactó en su momento.
Dado que una película dirigida por Roy Ward Baker, director de tantas grandes películas fantásticas, con guión de Robert Bloch y con actores como Peter Cushing y Herbert Lom me daba unas ciertas garantías pillé una copia y me puse a verla esta semana.
Pertenece a un subgénero de terror muy extendido, el de los relatos cortos engarzados con más o menos gracia en la onda de Los ojos del gato, Creepshow, las películas británicas de los 70 basadas en los cómics de la EC, o la película de Roger Corman basada en cuentos de Poe. En este caso, un médico, Robert Powell, el Mahler de Kurt Russell o el Jesús de Zefirelli, habla con diversos enfermos mentales recluidos en un manicomio para descubrir quién de ellos es el antiguo director del sanatorio. Si lo descubre conseguirá un trabajo. La primera historia es la típica del muerto que vuelve de la tumba para vengarse y tiene momentos realmente espeluznantes. a élla pertenece esa escena que me marcó, por cierto. La segunda, con Peter Cushing y Barry Morse (el inspector de El fugitivo y el científico de la primera temporada de Espacio 1999) se centra en un sastre que tiene que preparar un traje muy especial y es uno de los más interesantes. La tercera, con Charlotte Rampling y Britt Eckland (que estuvo casada con Peter Sellers pero también con Slim Jim Phantom, el batería de mis queridos Stray Cats), es la más floja porque ves venir el final a un kilómetro y tiene detalles francamente poco creíbles. La cuarta, con Herbert Lom como el creador de unos muñecos a los que insufla vida, acaba interactuando con la trama general que tiene un final algo previsible pero correcto.
Esa noche fui a dormir sintiendo que me había quitado un peso de encima, la verdad...
yo creo que a todo el mundo le pasan cosas de estas, claro ahora con internet y con un mucho de paciencia puedes descubrir esas péliculas con las que te quedabas pillado. A mi lo más parecido que me pasó fue con una serie de los domingos al mediodia (no, no era verano azul ni curro jimenez) que con el paso de los años descubrí que se llamaba Otherworld.
ResponderEliminarFelicidades por el descubrimiento y comprendo el peso que te sacas de encima
QUE BUEN AFICHE ESOS ERAN AFICHES
ResponderEliminarARTE,Y PETER CUSHING,OOTRO DE LOS
GRANDES QUE SE FUE,JUNTO A MI VENERADO VINCENT-SALUDOS A PALMA
WWW.VINCENT-CASTRO.BLOGSPOT.COM
MIS COMICS ZARPADOS....