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miércoles, junio 13, 2007

Originales: Motorista Fantasma de Salvador Larroca

Junto a la portada de Kane comentada en el anterior post, compré una portada de Salvador Larroca del Motorista Fantasma, la del Ghost Rider #62 concretamente. Está entintada por Sergio Meliá.
Recuerdo en un salón de Barcelona que Larroca enseñaba las primeras páginas de su primer número del Motorista y que me encantaron, especialmente una con la transformación. Por motivos sentimentales, aunque tengo una relación de amor-odio con la etapa de Danny Ketch y Howard Mackie, me apetecía tener algo del personaje.
Es una portada guapa pero la verdad es que cuando uno ve lo que está haciendo este hombre ahora mismo es que no parece el mismo dibujante. Cómo se notan los años de profesión constante y los frutos que le han dado...
Los logos, por cierto, están en un acetato que está por encima del dibujo que es totalmente limpio. Os cuelgo la imagen con el acetato.

Originales: Portada de Gil Kane

En los años setenta, el gran Gil Kane dedicó buena parte de su tiempo a dibujar portadas para Marvel siguiendo diseños propios o de otros como Dave Cockrum o Marie Severin. Cuando se le pedía por sus favoritas, siempre destacaba las que realizó para los títulos de western de esos años, casi todos reediciones y a las que casi nadie prestaba atención. Kane disfrutaba especialmente esas portadas porque al no ser importantes para Marvel podía hacer lo que le daba la gana desde un punto de vista artístico. Tengo una historia completa que realizó del Llanero Solitario que venía junto a las instrucciones de montaje de una maqueta en esa época y es sensacional.
Quería una de estas portadas y cuando vi que un coleccionista, por problemas económicos, ponía toda su colección a la venta, pedí precios de varias cosas, entre ellas dos portadas de Gil Kane de esas reediciones. Acabé pillando la del Mighty Marvel Western #42 porque está protagonizada por mi querido Rawhide Kid y porque el dibujo era muy superior. Hay que ver lo que se entretuvo el hombre en dibujar cornilargos. Y encima a tinta, cuando por esa época y para darse prisa tendía a usar rotuladores...
Veréis que hay una mancha amarillenta. Es porque allí había un texto pegado que ha desaparecido con los años. ¡Oh, bueno, al menos así veo lo que hay debajo!